Su composición mineral única favorece la hidratación celular y la regeneración de tejidos, siendo ideal para mantener un cuerpo saludable y en armonía.
Utilizada como suplemento dietario, el agua de mar es una fuente natural de nutrientes que pueden fortalecer el sistema inmunológico y mejorar el funcionamiento digestivo. Además, se considera beneficiosa para el cuidado de la piel y como complemento para una dieta equilibrada, proporcionando vitalidad y energía de forma natural.